La Asociación de Afectados por las Riadas de la Cuenca del Ebro (ASAFRE) denuncia que se acerca un aumento de caudal de este río (debido a las alertas por lluvia y nieve en distintos puntos) y que todavía no se han llevado a cabo todas las obras necesarias para reparar las infraestructuras públicas y particulares que se vieron afectadas en la última riada de 2015.
La Junta de ASAFRE exige que se refuerce y se cumpla la Ley, ya que tanto el Gobierno central como el autonómico han hecho caso omiso a lo expuesto en el Real Decreto-Ley 2/2015, de 6 de marzo de 2015, y Decreto-Ley 1/2015, de 9 de marzo, donde se contempla la adopción de medidas urgentes para reparar los daños ocasionados.
ASAFRE ha hecho público el siguiente comunicado de prensa:
“En su disposición final segunda sobre la evaluación de impacto ambiental, el Real Decreto-Ley 2/2015, de 6 de marzo de 2015, previó lo siguiente:
‘Mediante acuerdo del Consejo de Ministros se determinará la exención de evaluación de impacto ambiental de aquellas obras de reparación o rehabilitación de infraestructuras, equipamientos o instalaciones a que se refieren los artículos 4, 5, 6, 7 y 8, que debiendo someterse a evaluación de impacto ambiental, conforme al artículo 7 de la Ley 21/2013, de 9 de diciembre, de evaluación ambiental, quedarán exentas de la sustanciación de dicho trámite en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 8, apartados 3 y 4, de la mencionada Ley 21/2013, de 9 de diciembre.’
De acuerdo a lo expuesto sobre estas líneas, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General del Agua, consideró que existían motivos excepcionales que justificaban la realización de obras de emergencia a las que se refería dicho acuerdo, así como su exclusión del trámite de evaluación de impacto ambiental.
En relación a los párrafos anteriores, las actuaciones en Novillas, Pradilla de Ebro, Boquiñeni, Alcalá de Ebro, Cabañas de Ebro, Torres de Berrellén, Monzalbarba, Pastriz – Torre Urzáiz, Nuez de Ebro, Osera de Ebro, Villafranca de Ebro, Quinto y Pina de Ebro se consideraron, en su momento, imprescindibles para evitar daños mayores en la próxima temporada de lluvias y se señaló que era necesario acometer estas actuaciones en el cuarto trimestre del pasado año para lograr el nivel de seguridad en los núcleos urbanos y evitar que aumente el riesgo de daños catastróficos.
En la actualidad, a punto de terminar el año 2016, estas actuaciones no se han llevado a cabo o están incompletas. Ante esta situación, la junta de ASAFRE ha manifestado, una vez más, su indignación y reclama que es necesario realizar todo lo posible para solventar el problema antes de que haya que volver a lamentar, no sólo pérdidas materiales, sino también humanas.
Las motas y diques que protegen los núcleos urbanos están sin terminar y hay que darse prisa para evitar que el tiempo influya negativamente en el río y deje imágenes tan desoladoras como las de 2015.”
Por todo lo mencionado la Asociación de Afectados por las Riadas de la Cuenca del Ebro, ASAFRE, ha solicitado una reunión con la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), y también con el presidente de Aragón, Javier Lambán.
Fuente: diariodelcampo.com