La FAO ha elevado la producción mundial de cereales a 2.611 millones de toneladas, lo cual refleja las revisiones al alza realizadas para el maíz, el trigo y el arroz.
Gran parte del crecimiento pronosticado está relacionado con los aumentos previstos en Europa, donde hasta el momento el clima favorable ha apuntalado las perspectivas relativas a los rendimientos y se prevé asimismo un incremento de las siembras, impulsado principalmente por la conveniencia de los precios. Los mayores aumentos de la producción en términos interanuales están previstos en la Federación de Rusia, Ucrania y la Unión Europea.
Según las previsiones actuales, la utilización mundial de cereales en 2018/19 asciende a 2.657 millones de toneladas, es decir, 45 millones de toneladas (un 1,7 %) más que en 2017/18. El incremento refleja los ajustes al alza realizados respecto de la utilización de trigo como pienso (principalmente en Australia) y el uso industrial de los cereales secundarios, predominantemente el maíz y la cebada.
Se prevé que la utilización mundial de trigo en 2018/19 ascenderá a casi 743 millones de toneladas, lo cual representa 5,6 millones de toneladas (un 0,8 %) por encima del nivel estimado para 2017/18. El incremento se concentra en un mayor uso del trigo como pienso, especialmente en Australia, donde la superficie de pastoreo se ha visto reducida a causa de condiciones atmosféricas secas y se ha tenido que recurrir al trigo para alimentar al ganado. En los demás lugares, se calcula que el ligero aumento del uso del trigo como pienso en la UE se verá compensado con creces por una disminución en la Federación de Rusia donde, al parecer, los productores de aves de corral están comenzando a utilizar maíz como pienso.
Se estima que la producción mundial de arroz crecerá en un 1,6 % hasta alcanzar los 514 millones de toneladas, esto es, 1,2 millones de toneladas por encima de lo pronosticado anteriormente. Gran parte de la revisión se debe a mejoras impulsadas por los rendimientos en China.
El pronóstico de la FAO relativo a la utilización total de cereales secundarios en 2018/19 se ha incrementado hasta alcanzar los 1.405 millones de toneladas, o sea, 4,7 millones más que en diciembre. A este nivel, la utilización mundial de cereales secundarios superaría en unos 34 millones de toneladas (un 2,5 %) el nivel estimado en 2017/18 y el uso como pienso alcanzaría un máximo histórico de casi 786 millones de toneladas, es decir, un 2,7 % por encima del nivel estimado en 2017/18, con los mayores aumentos anuales previstos en China, México y los Estados Unidos.
La utilización mundial de arroz en 2018/19 está fijada en 509 millones de toneladas, lo que representa una expansión anual del 1,1 %, debida principalmente a un mayor nivel de consumo de alimentos en Asia y África.
Según las previsiones, las reservas mundiales de cereales disminuirán en 45 millones de toneladas (un 5,6 %) respecto de sus niveles de apertura sin precedentes y alcanzarán los 772 millones de toneladas. En consecuencia, el coeficiente mundial de reservas-utilización se mantendría en un nivel relativamente cómodo del 28,5 %, aunque estaría ligeramente por debajo del nivel de 2017/18 del 30,8 %, el más elevado desde 2000/01.
El pronóstico de la FAO relativo a las existencias de trigo (al final de la campaña en 2019) se ha revisado con un incremento de 2,4 millones de toneladas desde diciembre, a causa de los ajustes al alza realizados en el Canadá, los Estados Unidos y la Federación de Rusia. Actualmente, se prevé que las reservas de trigo ascenderán a casi 267 millones de toneladas, cifra que seguirá estando 10 millones de toneladas por debajo de los niveles iniciales, dado que las reducciones en varios países compensarán con creces las acumulaciones adicionales en China.