El Consejo de Ministros acordó el pasado viernes la ocupación urgente de los terrenos afectados por la ejecución de las obras del embalse de Almudévar, infraestructura hidráulica del Sistema de Riegos del Alto Aragón. Las expropiaciones afectan a los municipios de Huesca, Vicién, Almudévar, Tardienta y San Garrén; y el pago se estima en unos 37,7 millones de euros.
El Gobierno Central asegura actuar de conformidad con la Ley de Expropiación Forzosa. Este proyecto del embalse de Almudévar, que responde a una importante demanda social de los regantes, prevé paliar los efectos de la sequía tanto en los agricultores, por la disminución de sus ingresos, como en el conjunto del tejido social, en el área económica y, principalmente, en el crecimiento o mantenimiento del empleo.
Las obras, presupuestadas en marzo por 102 millones de euros, contemplan la construcción de un embalse con capacidad para almacenar 169,41 hectómetros cúbicos de agua mediante dos presas o diques de materiales sueltos que cierran, en sus costados occidental y oriental, una vaguada natural cercana al municipio oscense. Esta actuación se completará con una estación de bombeo, una subestación eléctrica y la reposición de los caminos afectados.
La infraestructura hidráulica proyectada tiene como principal objetivo regular los riegos del Alto Aragón, al posibilitar el almacenamiento de los caudales del río Gállego que superen la capacidad de embalse de La Sotonera así como de los excedentes de regulación del río Cinca.
El embalse de Almudévar forma parte del proyecto que incluye el proyecto de pantano de Biscarrués, obras que en su conjunto tienen como principal objetivo regular los Riegos del Alto Aragón, permitiendo, por un lado la laminación de las avenidas del río Gállego y, por otro, la aportación de caudales para riegos en periodos de escasez.