3.815 millones de euros invertidos en la modernización de 1,5 millones de hectáreas de regadío: estas son las grandes cifras del balance que se puede hacer de la década y media que llevamos de siglo XXI en materia de modernización de regadíos en España. A esta cantidad a la que hay que añadir además la partida correspondiente al amueblamiento de parcela. Son obras acometidas en el marco del Plan Nacional de Regadíos (desde el año 2000).
La inversión pública ha sido de 2.643 millones de euros, sumando las aportaciones europea, nacional y de las comunidades autónomas. La inversión privada ha sido de 1.172 millones de euros.
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente apunta que “con la modernización del regadío se ha conseguido reducir el consumo de agua, reduciendo la presión sobre las masas de agua; presión que también se ha reducido por contaminación, ya que los retornos de riego se han minimizado“.
El Ministerio afirma igualmente que “se han incorporado en muchos casos recursos hídricos no convencionales, disminuyendo la presión sobre los convencionales; y se han introducido elementos, como el telecontrol, que permiten una gestión óptima del binomio agua-energía“.
Y añade: “Las actuaciones llevadas a cabo han conseguido mejorar el nivel de vida de los agricultores e incorporarles a la sociedad de la tecnología, la información y la innovación; y han favorecido la fijación de la población al territorio, haciendo atractivo el trabajo en el medio rural“.
Fuente: diariodelcampo.com