Las organizaciones profesionales agrarias muestran su preocupación por la decisión del pueblo británico de abandonar la Unión Europea. UAGA-COAG afirma que el sector agrario se puede convertir en el pagano de crisis políticas e institucionales ajenas a su voluntad, UPA anuncia que el brexit no será beneficioso, y ASAJA recuerda que el agro es convencidamente europeísta.
Reino Unido es el quinto cliente de España dentro de la Unión Eurpea, con unas exportaciones de 3.700 millones de euros en 2015. La balanza comercial es muy favorable a España. El 90 por ciento de las ventas españolas en Reino Unido son frutas y hortalizas, cítricos, aceite de oliva y aceituna de mesa, vino, y carnes (en particular porcino y aviar).
UAGA-COAG considera el brexit como un acontecimiento crucial para la historia de la Unión Europea; la gravedad de este hecho sin precedentes y la crisis política e institucional abierta afectan de lleno a la agricultura española y europea. Añade que la Unión Europea debe mostrar la máxima protección para el mantenimiento de las exportaciones y de las rentas agrarias; es responsabilidad de toda la Unión Europea preservar el modelo social y profesional de agricultura, mayoritario en Europa y en nuestro país, así como la seguridad y la soberanía alimentaria del continente.
La organización UPA apunta que el Reino Unido es uno de los principales mercados para las exportaciones españolas, y las rupturas siempre traen problemas. Además, incide en que la Unión Europea ha permitido que disfrutemos del sector agroalimentario que tenemos hoy en día, que es el mejor del mundo; menos Europa y menos Unión significarán relaciones comerciales más complejas y volátiles, y en ningún caso será beneficioso para nuestro país.
Desde ASAJA se apunta que no es una buena noticia que se debilite la fuerza de una gran potencia como es la Unión Europea, porque si todos los agricultores y ganaderos europeos suman una sola voz pueden afrontar mejor los desafíos y negociaciones con países terceros en el contexto extremadamente competitivo de los mercados internacionales.
Añade que es impensable desde el punto de vista agrícola que ahora regresaran aranceles o contingentes de importación o exportación; lo lógico es pensar que los intercambios de mercancías, y productos alimentarios en concreto, sigan produciéndose en un marco de libertad como hasta ahora.
Fuente: diariodelcampo.com